Es una técnica de adivinación que permite la predicción del futuro leyendo los pliegues, lunares y fisuras, similar a una lectura de manos.
Hay redondas, chatas, algunas más caídas, otras bien paraditas… Punto
inevitable de la mirada masculina, de acuerdo a esta técnica, la cola
puede ser algo más que un simple objeto de deseo.
Es que según
Jackie Stallone, astróloga y madre del famoso actor sylvester stallone, todo
nuestro futuro está escrito ahí. Sí, se puede ver en las nalgas. Los
lunares, las marquitas, los pliegues, todo tiene un sentido y se conecta
con nuestro pasado y con lo que vendrá.
De acuerdo a las propias palabras de esta estudiosa de las mancias, la técnica se denomina “rumpología” y fue practicada en la antigüedad por los babilonios y los hindúes.
Al
igual que el Tarot o las Runas, los expertos sostienen que la cola
devela todas las posibilidades que nos depara la vida. Basados en una
matriz tomada de la neurología, afirman que el glúteo derecho representa
el hemisferio cerebral izquierdo (predice lo que vendrá) mientras que
el glúteo izquierdo representa el hemisferio cerebral derecho (habla
sobre el pasado).
Los expertos en rumpología afirman que los músculos que conforman los
glúteos develan todas las posibilidades de vida de una persona y basados
en una estructura copiada de la neurología.
Cómo eres, según tus nalgas
-Cola forma de manzana: Eres una persona carismática, dinámica, muy creativa y que goza de la vida.
-Cola forma de pera: Eres una persona es de carácter firme y paciente. Son personas en apariencia duras, pero sensibles en realidad y tímidas. Tienen la capacidad de relajarse fácilmente.
-Cola de forma redonda: Eres alegre y optimista. se refiere a personas que son buenos amigos, les gusta ayudar y escuchar, son modestos y no les gusta tener toda la atención.
-Cola de forma plana: Eres una persona negativa y depresiva. Son personas que en apariencia parecen muy sociables y les encanta estar
en grupo, pero en realidad son susceptibles y les afectan las críticas y
reaccionan mal ante ellas. son reservadas y odian los escándalos. son abiertos, suspicaces y cínicos. Su problema principal radica en
la lenta toma de decisiones y en lo difícil que es hacerlos cambiar de
parecer.
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